Vienes caminando un día cualquiera y, de repente, un león ofrece su boca para que entres. ¿Qué haces? Puedes meterte o no, asomarte con sigilo o lanzarte decididamente, pero, ¿qué significa meterse en la boca del león?
A través de las metáforas decimos el mundo de manera figurada, y la realidad se vuelve así más poética. Este libro es una gran metáfora, con tan bravos como mansos leones que no hacen sino hablarnos (¿o rugirnos?, ¿o ronronearnos?), de nuestros temores y osadías, de nuestras fortalezas y debilidades, de nuestro lugar como habitantes del mundo
Vienes caminando un día cualquiera y, de repente, un león ofrece su boca para que entres. ¿Qué haces? Puedes meterte o no, asomarte con sigilo o lanzarte decididamente, pero, ¿qué significa meterse en la boca del león?
A través de las metáforas decimos el mundo de manera figurada, y la realidad se vuelve así más poética. Este libro es una gran metáfora, con tan bravos como mansos leones que no hacen sino hablarnos (¿o rugirnos?, ¿o ronronearnos?), de nuestros temores y osadías, de nuestras fortalezas y debilidades, de nuestro lugar como habitantes del mundo